Entrevista 17/22
Bienvenida a mi blog ¿Qué tal si te presentas y nos cuentas algo sobre ti? (Datos personales, lugar de residencia, edad, gustos literarios...)
Hola Joaquín. Estoy encantada de compartir contigo este tiempo. Mi nombre es Tula Fernández, nací en la provincia de Cádiz, pero soy Ceutí de adopción. Creo que una pertenece al lugar donde le nacen y se crían los hijos, así que he convertido Ceuta en mi ciudad. Me gusta el deporte. A veces debo hacer malabares entre dedicarme a entrenar o sentarme a escribir. Últimamente gana lo segundo, a pesar de que mi cuerpo a veces me reclama un poco más de atención. A estas alturas de mi vida no deseo renunciar a mis pequeñas grandes pasiones y la escritura es mi gran pasión. Compagino la escritura con la docencia. Creo que la educación es el pilar de una sociedad mejor, así que disfruto de mi profesión cada día. Me siento afortunada de haber podido sortear hasta ahora el desánimo que a veces, y justificadamente, acompaña a nuestra profesión.
¿Por qué te decidiste a escribir?
Rumié la idea, si me permites la expresión, durante algunos años. Mis amigos me animaban, los que conocían algo de mis escritos me animaban y yo misma me animaba, pero sentía un enorme respeto por esta labor y eso me mantuvo frenada mucho tiempo. Finalmente fue una experiencia vital el detonante de que comenzara a escribir mi primera novela. La boca de los cien besos nació en Miami mientras trabajaba allí unos años como profesora visitante. No era consciente de que estaba escribiendo una novela hasta que unas páginas cayeron en manos de un editor allí y me hizo una evaluación tan buena que acabé pensando que efectivamente podía llamarme escritora. Todavía hoy utilizo esa palabra con pudor y respeto.
¿Desde cuándo publicas?
Esto que te cuento sucedió en 2018. Luego, al regresar a España y por motivos de distribución, volví a realizar una nueva edición del libro con Caligrama. La boca de los cien besos ha resultado finalista este año en los premios Talento de la editorial y no puedo sentirme más feliz. Llegar hasta ahí ha sido ya un premio para mí.
¿Cuántos
libros has escrito?
Tengo dos novelas publicadas y algunos relatos. La boca de los cien besos y La inocencia de los sublimes que fue publicada el año pasado.
Háblanos de tu último libro.
La inocencia de los sublimes es un híbrido muy atrevido e interesante. Mezclo el thriller con el melodrama. No soy escritora de thrillers y no es un género que yo disfrute en exceso como lectora, pero la editorial lo calificó así. De hecho hay un misterio que nos acompañará durante toda la novela, sucede entre Oviedo y Madrid, y que enganchará con otro misterio en tierras argentinas pero, para mí, lo mejor de mi novela es lo que transcurre en ese pequeño pueblo de Argentina, Apóstoles. Ahí nos vamos a encontrar con un grupo de ancianos muy peculiar. El trasfondo de La inocencia de los sublimes es una oda a la vejez libre. Apóstoles es una especie de arcadia vital a la que todos aspiramos llegar.
¿Qué proyectos tienes ahora mismo en mente?
Estoy escribiendo una tercera novela. Ya está bastante avanzada pero aun queda un gran recorrido. Ojalá pudiera escribir más tiempo, pero hay día en los que no puedo. Esos días no me gustan, pero no hay más remedio que compaginar trabajo y escritura.
Una curiosidad: ¿Sobre qué tema/s jamás te atreverías a escribir?
Nunca lo había pensado. Pero creo que no renuncio a ningún tema en principio. Otra cosa diferente es que tenga una motivación o no para hacerlo.
¿Cómo ves el panorama literario actual?
Lo veo complicado. Creo que se publica mucho y eso tiene una parte positiva y otra menos. Entre tanta publicación es difícil colocar tus obras en el punto de mira de editoriales de primer nivel, aunque hay que reconocer que la autopublicación o la coedición han venido a hacer posible lo que hace unos años era impensable. Me voy a atrever a decir que hoy prima lo comercial a la calidad y eso me frustra a veces.
Si tuvieras que recomendar un libro que no fuera tuyo, ¿cuál sería?
Recomendaría cualquiera de los libros de Maggie O´Farrell. Se ha convertido en una de mis escritoras del momento favoritas. Y, por supuesto, García Márquez, mi autor preferido. Me dicen mucho que mi estilo recuerda a él y yo aun me ruborizo al escucharlo
¿Qué consejo le darías a alguien que esté iniciándose en el mundo de la literatura?
Le aconsejaría que se introdujera en este mundo por el mero placer de escribir. Le aconsejaría también que disfrutara cada línea o capítulo o libro que escribiera y que viva intensamente el recorrido que ofrece convertirte en autora o autor. Si no es así, podría caer en la frustración de no cumplir con las expectativas propias del que comienza a escribir: tener éxito. Primero hay que disfrutar, y si hay calidad y suerte por igual, puede que el éxito llegue.
Ahora sí. Quiero que me convenzas de por qué debería leer tus libros. Es el momento de mostrar tus dotes de vendedora.
Soy muy mala vendiéndome. Es uno de mis grandes defectos. La parte divulgativa, la comunicación en redes sociales etc, ese no es mi fuerte, aunque soy consciente de que hay que hacerlo. Soy honesta, no me gusta vender humo y mis novelas transmiten, creo, esa honestidad. Mis dos novelas están escritas desde la humildad de alguien que ha descubierto una pasión y que recibe buenas críticas por lo que hace. Mi público es amplio, pero sé que las personas en torno a los cincuenta y de ahí en adelante son las que más disfrutan de mis historias. Eso lo he aprendido a partir de mis ventas, presentaciones y demás actividades literarias que realizo. Si al lector le interesa el lenguaje cuidado, el estilo literario y la calidad entonces lo animo a que me lea.
¿Cuál es tu meta como escritora?
No me importaría seguir compaginando docencia y escritura, pero sí me gustaría llegar a pertenecer a un sello editorial importante.
