La Corona Pagana de plata

Entrevista 1/22

Bienvenida a mi blog ¿Qué tal si te presentas y nos cuentas algo sobre ti?

Hola, gracias por traerme a tu blog. Me llamo Andrea, actualmente vivo en Priego de Córdoba, lugar donde he crecido, nací en 1996 (el otro día leí en redes sociales que muchos lo consideran el año “dorado” por coincidir con el nacimiento de muchos actores jóvenes muy queridos actualmente), estudié Comunicación Audiovisual en Granada y Escritura Creativa en Sevilla, y desde siempre he tenido una tendencia innata por imaginar historias en diversos ámbitos, ya fuera a través del cine, los libros, la ficción en TV, la pintura, la música… Toco el violín (mediante el conservatorio) y la guitarra y el ukelele de forma autodidacta. Desde antes de saber leer, ya me gustaba coger libros e imaginar historias viendo sus ilustraciones, y la primera rama artística que empecé a desarrollar (también antes de saber leer) fue dibujar cómics, haciendo muchas historietas y contándole a la gente lo que se suponía que decía cada personaje en cada viñeta (pues como aún no sabía leer, tampoco escribir). De hecho, durante toda la primaria inventé e hice un cómic llamado “Ángel y Nina”, de un perro y una gata de pelaje azul que se llevaban fatal pero, en el fondo, se admiraban mucho. Acompañó a mis compañeros de clase durante seis años, pues la mayoría siempre esperaban con ganas cada semana que sacara un nuevo número de ese cómic que hacía y difundía por clase.

¿Por qué te decidiste a escribir?

Como digo, siempre me ha gustado “escribir” desde antes de saber hacerlo. Antes solo imaginaba las historias y se las contaba a mis compañeros, padres o personas que estuvieran interesadas en escucharme. Luego llegó el saber escribir y, con ello, el poder plasmar todas esas ideas que tenía en la cabeza (y ya no olvidarlas, además de poder darles muchos más matices, pues mientras se escribe también se va imaginando aún más que solo al pensarlas). Dibujar también fue un aliciente importante para comenzar a escribir como tal, pues todas esas historias e ideas las plasmaba originariamente a través de dibujos (algunos dibujos tal cual, y otros a través de cómics como dije antes). Todo esto, acompañado de que me encanta la música y tocar instrumentos, considero que ha hecho que, a lo largo del tiempo, de estas pasiones primarias se haya ido desarrollando en mí también una concepción de la ficción bastante acercada al cine, pues qué es el cine sino una mezcla de todas estas ramas artísticas condensadas en un mismo medio.

¿Desde cuándo publicas?

Aunque anteriormente ya había publicado algunos poemas y relatos en blogs, además de otros que han salido a la luz a través de concursos (por ejemplo, tengo dos poemas publicados en dos libros antológicos de dos concursos, así como otro en un libro que hicimos para conmemorar el final del Máster en Escritura Creativa), como tal en noviembre de 2021 fue cuando salió a la luz el que realmente considero mi primer libro, Hora de escuchar a la oveja negra.

¿Cuántos libros has escrito?

Literalmente, escritos tengo dos y otros dos en camino, pero publicados solo uno (el mencionado anteriormente y protagonista de hoy).

 

Háblanos de tu último libro.

Hora de escuchar a la oveja negra es un libro de poemas donde se destaca la “otra mirada” (ya que se dice que los poetas miran… perdón, miramos mucho el mundo y lo interpretamos… o sentimos, no sé muy bien dónde poner [o dónde nos ponen] la diferencia) y donde encontraréis poemas muy sociales, reivindicativos, originales y creativos, donde trato temas desde aquellos más personales basados en experiencias propias, hasta otros donde le pongo mi interpretación a muchísimos temas sociales, tanto de antaño o históricos como de actualidad, pasando por poemas graciosos, otros más serios, algunos sobre la naturaleza, otros muy “animales”, otros algo crudos e incluso escatológicos, otros bonitos, otros que llegan más al sentimiento y otros que llegan más a la pura lógica de lo que hay, ha habido (y me adelanto que pudiera haber).

Además, este libro destaca también por tener poemas tanto escritos con métricas clásicas y rimas, hasta otros más “libres” y modernos (estos últimos sin llegar a ser frases de sobre de azúcar escritas en verso fingiendo así ser un poema… que se dé por aludido quien se identifique con esto).

También me gustaría destacar que, como tal, no hay ningún poema “romántico” (entendiéndose esto que me refiero al sentido de “romántico” que le dan muchas veces las personas a esta palabra, pues el romanticismo es algo que no solo tiene que estar ligado al concepto de parejas o relaciones humanas desde la perspectiva de amor sexual y sentimental, sino que [y de hecho] se encuentra en muchísimas otras cosas y circunstancias, aunque no he venido a reflexionar sobre esta cuestión sino que… ¡yo he venido aquí a hablar de mi libro!).

En definitiva, un libro combativo, gracioso, serio, reivindicativo, personal y, bajo mi punto de vista, bastante original, en el que creo que muchas personas podrán sentirse identificadas, sobre todo jóvenes y aquellos adultos que tiren a la vejez que no hayan perdido su propia infancia y aún tengan dentro ganas de conocer el mundo, en vez de cruzarse de brazos ante el mismo.

¿Qué proyectos tienes ahora mismo en mente?

Actualmente, además de poner en marcha el que será mi segundo libro y terminar el que tercero y cuarto que van de camino (uno de poesía y otro de relatos), estoy desarrollando dos guiones; uno para película musical, y otro para serie que, creo, podrán gustar bastante si algún día logran ver la luz y ser aceptados por una productora.

Una curiosidad: ¿Sobre qué tema/s jamás te atreverías a escribir?

Por desconocimiento (y por absoluta pereza en caso de que tuviera que ponerme a documentarme) sería sobre épocas medievales. En sí, tanto en cine como en la literatura, la época medieval siempre me ha dado mucho efecto “siesta” y es algo de lo que no me gusta leer ni ver en ficción, por lo cual tampoco me gustaría escribir una historia ambientada en esa época, de la cual tendría además que documentarme mucho porque apenas sé más allá de lo estudiado en el colegio e instituto (que tampoco fue mucho, aprovecho para meter pulla al sistema educativo en relación a la asignatura de Historia). Por otro lado, y ya metiéndonos en el ámbito de guion cinematográfico, tampoco escribiría una historia de western. Creo que es el género cinematográfico que menos me gusta con total e infinita diferencia.

¿Cómo ves el panorama literario actual?

Creo que, por un lado, está resurgiendo (si lo comparamos con épocas antiguas, donde ser poeta era el equivalente a ser el streamer del momento, y los libros en general se devoraban), pues se ha tirado un tiempo bastante apartado del concepto de ocio de la sociedad (cosa que también es entendible, viendo el auge de medios audiovisuales rápidos que se consumen como entretenimiento desde hace un tiempo, algo que está muy bien, aunque ojalá no se dejara a los libros tan de lado, pues también entretienen muchísimo). Este resurgimiento se ve a través de historias que se acercan

más a los jóvenes y no son las típicas historias de caballería medievales escritas en castellano antiguo que tanto nos intentan meter con calzador en los colegios e institutos (otra pequeña pulla, a ver si a la tercera va la vencida), como “Los juegos del hambre”, “El diario de Greg”, “Heartstopper” y novelas que empezaron como fanfics y se han terminado editando como libros. Así mismo, la poesía también está teniendo mucho más auge que hace algunos años, sobre todo aquella que es compartida por redes sociales y luego termina recopilándose en libros.

Pero, por otro lado, creo que la mala organización que hay respecto a cómo se distribuyen los beneficios económicos hacia los escritores, las editoriales (sobre todo cuando hablamos de editoriales tradicionales) y la forma que se tiene de difundir muchos de los libros, sigue suponiendo aún una traba enorme en el mundo literario, sobre todo editorial. Hace tiempo leí (no sé si esto es real o no, pero no voy a buscarlo para no perder la ilusión en caso de que no sea real, ignorante pero feliz, sí señor…) que en países del norte como Finlandia, el oficio de escritor está per se reconocido como una profesión como tal, como un trabajo, por lo que toda aquella persona que sea escritora ya tiene un sueldo mensual asegurado, venda luego lo que venda con su libro.

También quiero añadir, si la respuesta no cansa por lo larga que está quedando, que también los temas que se tratan y la forma ha hecho que cambie mucho todo y la gente consuma más literatura, y esto es porque antes todo lo que había para leer (generalizando) eran libros escritos por hombres cishetero donde reinaban las historias de hombres cishetero con sus problemas y tramas de hombres cishetero (qué casualidad). Pero desde que las mujeres pasaron a ser personajes y dejaron de ser floreros cuya única utilidad en la historia era ser el interés amoroso estereotipado del protagonista (hombre cishetero, por si no había quedado claro), las personas LGTB también tomaron importancia y sus tramas no se reducían a salir un segundo como el amigo experto en moda perrito faldero de alguna chica, y hay muchísima más variedad de personajes (desde aquellos gordos cuya trama no se supedita simplemente a que son gordos y “ay qué pena, que soy gordo” o “qué divertido soy como personaje porque soy gordo y todos mis chistes irán sobre eso” hasta enseñar a otros con discapacidades o cuyas tramas no se doblegan a la condición que los hombres cishetero reyes de la industria, tanto literaria como televisiva y cinematográfica, les daban hasta ahora), todo ha cambiado para bien y ahora hay muchísimo más interés por leer porque todo esto otorga descubrimiento y entusiasmo por tener en tus manos una nueva historia en la que poder leer algo nuevo y no lo mismo de siempre que para nada representaba a toda la sociedad (aunque intentaban hacernos creer que sí).

Si tuvieras que recomendar un libro que no fuera tuyo, ¿cuál sería?

De libros conocidos, y aunque suene a “mira la intelectual”, recomendaría muchísimo “Los Miserables”. Descubrí esa historia a través del musical, pero el libro es impactante en todos los sentidos y en absoluto se hace aburrido como tal. También recomendaría mucho (aunque esto creo que no hace falta) el de “Los juegos del hambre”, pero en el sentido de que lo recomendaría como lectura en los colegios e institutos (aquí está la tercera vencida). Puede sonar a “mira la poco intelectual” pero realmente este libro enseña bastante más concepto de política de lo que se cree (aunque, si hablamos de política y sociedad, recomiendo mucho “La cúpula”, de Stephen King).

Otro libro, pero este desde la perspectiva psicológica y periodística, que recomiendo mucho, y siempre se sorprenden cuando lo hago, es “El exorcista”, de William Blatty. Pocas veces he visto un tema así tan bien tratado a nivel realista, pues el libro casi nada tiene que ver con la película (que me encanta, por cierto) en ese sentido.

De libros no famosos, recomiendo algunos como “Reencuentro con el norte que me hiciste perder” y “El hilo de Creta”, ambos de Marta Synés, “Ahora paquete salga maricón” de Ga(y)zer (aún no ha salido a la venta) y “Cansada de ser la única”, de Abraham Ordóñez (que también saldrá dentro de un tiempo, pero yo siempre me llevo las exclusivas).

¿Qué papel crees que juegan actualmente las redes sociales en la difusión de la literatura?

 

Un papel crucial, sin lugar a dudas. Las redes sociales son un importante motor de promoción (en primer lugar), difusión (en segundo) y meta (en tercero), pues se puede llegar a bastante gente. De hecho, ¿cómo hacía la gente antaño para promocionar las cosas que hacía? Realmente no lo sé. Yo ya cuento con las redes sociales e Internet en general para todos estos temas, si no, hablo en serio cuando digo que no sé cómo lo haría ni sé cómo llegaban a hacer famosos sus libros y obras personas de antaño, pues con el boca a boca (y más antes cuando no había tantos medios y globalización) no considero que nunca haya sido suficiente.

Ahora sí. Quiero que me convenzas de por qué debería leer tu/s libro/s. Es el momento de mostrar tus dotes de vendedora.

Porque no es un libro “cotidiano” que refleje los mismos poemas de siempre con las mismas temáticas de siempre. Porque ya va siendo hora de hacer poemas de temas diferentes, en los que la gente necesite verse reflejada de verdad, comprendida y sientan que tienen voz y un megáfono que les ayude a expresarse en caso de que ellos no lo hagan de forma mediática o artística como sí puede serlo este libro. Y también porque (y esto no lo digo yo, sino que lo dicen quienes ya lo han leído) es un libro tremendamente entretenido que, literalmente, en un día y medio se puede leer por lo que engancha (y no, no me lo han dicho amigos ni conocidos, sino personas desconocidas que se lo han leído y luego me han contactado).

¿De qué géneros o temáticas te gusta escribir más?

A la hora de escribir, mis géneros y temáticas suelen coincidir mucho también con lo que suelo consumir y catalogo como mis favoritas, y estas son la poesía, el musical, el gore, el terror, el cine independiente/indie y las temáticas marcadamente LGTB.